Antes de ser sembradas algunas semillas requieren cierta preparación. Este tratamiento puede bien ser escarificación, estratificación, mojado de las semillas o lavado de las semillas con agua fría o tibia.
El mojado de las semillas es por lo general realizado remojando las semillas en agua tibia durante 24 a 48 horas. El lavado de las semillas es muy común en el caso de frutas (ya que la carne de la fruta que rodea la semilla puede ser rápidamente atacada por insectos o plagas. Para limpiar la semilla, por lo general se frota la semilla con un trozo de género o papel, y a veces se procede al lavado de la semilla. Por lo general el lavado de las semillas se realiza sumergiendo las semillas durante unos 20 minutos en agua a una temperatura de 50 °C.5 El agua tibia a caliente mata los microorganismos que pudieran haber sobrevivido en la superficie de la semilla. Las limpieza con agua a alta temperatura es muy importante en semillas de frutas tropicales que pueden ser infectadas con facilidad.